Florentino Pérez siempre ha tenido claro que Vinicius y Rodrygo eran apuestas seguras. El máximo mandatario blanco, que con la Copa del Rey ganada a Osasuna supera a Santiago Bernabéu en títulos con el equipo de fútbol del Real Madrid, apostó y protegió en los momentos más complicados a dos jugadores que están llamados a marcar una época vestidos de blanco. Ambos ya han ganado todo lo que podían ganar a los 22 años y nadie conoce realmente cual será su techo, pero lo que sí tiene claro el presidente es que será tremendamente elevado.
Florentino blindó a los dos jugadores brasileños cuando las críticas eran feroces. Es cierto que el Real Madrid hizo una fuerte inversión por ambos cuando todavía no habían cumplido ni la mayoría de edad, pero en la cúpula siempre confiaron en que esta apuesta arriesgada liderada por Juni Calafat, principal culpable de que ambos estén en el club blanco, y avalada por el mandatario iba a ser la correcta.
Vinicius llegó al Real Madrid en el verano de 2018 siendo tremendamente joven y con mucho que evolucionar física y futbolísticamente. Le costó y sufrió con Lopetegui, que aseguraba que le falta tiempo de cocción. Se sintió feliz con Solari, que le dio la oportunidad de tener minutos con regularidad. Y sufrió con Zidane, el que no terminaba de ver claro su progreso y no veía con malos ojos una posible cesión. Florentino siempre se negó. Con la llegada de Ancelotti, una dosis extra de confianza y la lógica, ya que es muy bueno, empezó a romper para terminar siendo uno de los tres mejores jugadores del mundo en este momento.
Durante este proceso, que ha sido duro, Vinicius ha tenido que soportar un sinfín de críticas. Muchas de ellas injustificadas y en donde se le ha faltado el respeto. Pero gracias a su fútbol y su fortaleza mental ha sido capaz de sobreponerse a todo para empezar a cumplir todas las expectativas que tienen puestas en él.
Con Rodrygo las críticas han sido menores, pero su camino tampoco ha sido sencillo. Llegó un año más tarde que Vini y le costó tener minutos con Zidane, alternando el primer equipo y el filial. La pasada temporada, Ancelotti le utilizó como el gran revulsivo. La noche ante el City es el mejor ejemplo. Y a base de trabajo y calidad ha terminado haciéndose con la titularidad. En el Real Madrid valoran muy positivamente como ha sido capaz de seguir peleando para hacerse con su sitio a pesar de ver el crecimiento de Vinicius. Ha logrado que nadie dude de si por la banda derecha los blancos necesitan un refuerzo.
Un palmarés impresionante
Vinicius y Rodrygo completaron en el estadio Olímpico de Sevilla un palmarés impresionante. Ya han ganado todo lo que se puede ganar como jugadores del Real Madrid, al igual que Militao y Camavinga. Los cuatro son tremendamente jóvenes, el más mayor es el central a sus 25 años y una década de fútbol por delante, y ya pueden decir que han completado una sala de trofeos que quieren seguir agrandando.